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13 de mayo de 2022

Apreciada funcionaria HCM se acoge a retiro voluntario después de 30 años de servicio

Por más de 30 años la nutricionista Patricia Alvarado Subiabre, fue una destacada profesional del equipo de Nutrición del Hospital Clínico, luego de haber sido parte de otras instituciones como el Hospital de Puerto Natales, JUNJI y Clínica Magallanes. 

Patricia es muy querida por sus colegas y “amigas” como ella también las califica. Han sido parte de su vida por todos estos años y hoy, Patricia se despide por acogerse a retiro voluntario.

“Es una gran emoción para mí, ver a todas mis colegas juntas. No puedo decir que siento nostalgia porque mi profesión la llevo en el corazón. Siempre quise ser nutricionista y lo fui por más de 40 años, ejerciendo activamente hasta el último día en el Hospital Clínico Magallanes. Por lo tanto, me siento muy orgullosa de lo logrado, los pasos que di frente a esta carrera que, hoy día, puedo decir que estoy cerrando un capítulo”, narró emocionada Alvarado Subiabre. 

Más allá de su nostalgia, la profesional en Nutrición recuerda su traslado al Hospital Clínico Magallanes: “Desde el primer día me dijeron que me hiciera cargo de la Unidad de Central de Producción. El trabajo fue arduo, desde limpiar pisos hasta lo que hoy día somos, técnicamente organizados, planificados y con sistemas de control establecidos”, destaca.

Su lado humano

Hay una persona que es muy cercana a “Patty” como la llaman sus colegas. Es Mariema Ugalde, jefa de la Unidad de Nutrición y Alimentación del Hospital Clínico. 

Las dos han sido compañeras inseparables dentro de la institución y, además, han visto cómo, en todos estos años, el equipo de Nutrición ha crecido.

“Patty ha sido una compañera a toda máquina. Ha sido una funcionaria ejemplar y una verdadera servidora pública. Siempre hemos trabajado en equipo, no exento de dificultades, pero siempre hemos salido adelante”, cuenta la funcionaria. 

Además, agrega, el espíritu de su compañera hasta el último día. “Destaco su energía hasta el último día antes de acogerse a retiro voluntario. Siempre activa en este servicio y voy a extrañar eso”, dice Ugalde. 

Su amor por la profesión 

Desde niña, Patricia siempre quiso ser nutricionista, pero se interesó más cuando escuchó una sabia frase de su mamá: “Cada vez que mi madre nos servía un plato de comida, nos decía en la mesa, ‘este plato tiene un condimento especial y agregado, ese condimento se llama amor. Desde ahí, nació mi interés para postular en la Carrera de Nutrición”, concluye emocionada la funcionaria que por más de 30 años perteneció a la familia del Hospital Clínico Magallanes.

FUENTE: Comunicaciones Hospital Clínico Magallanes